Es decir

Ayer escribí que desecar es un poco extraño, porque a menudo las palabras que comienza con “des” son los opuestos que lo que siguen. Por ejemplo, desayunar es lo opuesto a “ayunar”, descansa” es lo opuesto a “cansar”, desaparecer, descubrir, deshacer, desconsolar, desafortunadamente, desilusionado, desorden, etcetera.

De hecho, el Diccionario RAE dice que el prefijo des- puede indicar variaciones así: negación o inversión (desconfiar), privación (desabejar), fuera de (descamino, deshora). A veces la origen no es tan obvio. No hay verbo struir en español, pero destruir viene de la latina struere, que también está relacionado con estructura, construir, instrucción. Sí existe el verbo arrollar, pero la relación con desarrollar no es muy clara. Me imagino a alguien hace planes con un gran papel como un mapa o un manuscrito que acaba de desenrollar.

A veces des- puede indicar exceso (deslenguado) o afirmación (despavorido), pero en mi experiencia limitada, estos casos son más raros.

Sin embargo, desecar viene del prefijo de-. La palabra es de- + secar, no es des- + “ecar”. Según la RAE, el prefijo de- es diferente que des-. En este contexto, creo que de- es para “reforzar el significado de la palabra primitiva”. Igualmente pero menos obviamente, el origen de desnudar es de- + la latina nudare.

Por supuesto no todas las palabras comienzan con prefijos. Por ejemplo, decir empieza con las letras de por casualidad. La palabra es de la latina dicire. Es decir, solo es decir, no es de de-.

De maneras extrañas

En algunas de nuestras clases hemos estado viendo un video que se llama “Frailejón Ernesto Pérez y la Leyenda de La Gota Más Pura”. Me cae estupendo, especialmente la tema musica, que es adictiva.

En este contexto, la semana pasada mi maestro usó la palabra “desecar”. Hizo una pausa breve y comentó sin explicación que la palabra es un poco rara. Entendí por qué — es decir, “secar” y “desecar” significan casi lo mismo. El ejemplo clásico en inglés es “flammable” y “inflammable”. Los dos quieren decir “fácil de quemar”. En español hay solo una palabra por esto: inflamable.

Sin embargo, por lo general el prefijo “des” hace lo opuesto. He sabido “desayunar” es lo opuesto de “ayunar” — es como en inglés “breakfast” significan el fin (“break”) de un ayuno (“fast”). También en francés: “déjeuner” significan lo opuesto de un ayuno (“jeuner”).

Y aún así me sorprendí más tarde en la semana cuando aprendí el verbo “cansar” en Duolingo. Por supuesto ya sé el adjetivo “cansado/a” y el verbo “descansar”. Pero en mi mente no me di cuenta de que ¡”descansar” es lo opuesto a algo! Es obvio en retrospectiva.

A veces sí hago conexiones lingüísticas rápidamente, a veces no. La mente funciona de maneras extrañas.

La búsqueda en español

Esta mañana acabo de ver un buen video en español sobre La Guerra filipino-estadounidense. Pues, es una version doblada de la que mencioné ayer. Es un poco larga y rápido para mi nivel y el de mis compañeros, el tono y el ritmo del narrador pierde algo del sentido del humor del original, y las palabras están escritas en inglés. Todavía es un buen recurso porque el original puede servir como muleta, especialmente para los principiantes en mi clase. También puede iniciar una conversación sobre las ventajas y las desventajas de cualquier traducción.

La búsqueda de la autonomía

Esta primavera, durante un almuerzo con mis padres, me di cuenta de la importancia de la lengua española en la historia de las Filipinas. Mis dos padres todavía recuerdan todo el poema Mi último adiós por el héroe filipino José Rizal, y también traducciones en inglés y tagalo. Sin embargo, para mi la traducción inglesa parecía un poco pasado de moda. Tiene sentido, no es su culpa, asistieron a la escuela primaria hace más de setenta años.

Inmediatamente tuve una idea de traducir el poema del español original a inglés contemporáneo. Ya hay traducciones pero quiero hacer una en mi propia voz. Compartí esta idea con mis maestros principales en Colombia, hace unos dos meses. Hemos estado traduciendo un libro del inglés al español, y estuvieron de acuerdo en que este nuevo trabajo sería una buena idea, y nos ayudaría a aprender más cultura e historia.

Esta tarde un maestro me mencionó la idea de nuevo. Me pidió ayuda para buscar recursos que darían contexto antes de que tratamos nuestra traducción — qué es la relación entre las lenguas española y filipinas, qué es la historia entre los dos países, quién es José Rizal y por qué escribió en español. Le dije que no soy experto, pero sí, esta sería una buena tarea para mi. Supongo que la verdad es soy el más experto en la clase. Así que, desde entonces, he estado buscando videos sobre estos temas.

Hasta ahora he encontrado varios buenos videos que explican por qué los filipinos hablan sí inglés pero no español, que también incluyen algo de historia sobre los dos países. Todavía tengo que buscar un video apropriado en español sobre la vida de Rizal. Encontré uno con audio claro, pero el presentador habla tan rápido y es solo una entrevista en la que faltan imágenes interesantes.

Además, no tiene relación tan directa con Mi último adiós, pero encontré videos sobre La Guerra filipino-estadounidense. Rizal fue asesinado por los españoles, pero dos años después, mientras Emilio Aguinaldo y sus soldados filipinos estaban librando contra los españoles, los EE.UU. se aprovechó de la situación y tomé las Filipinas de los dos. Esta es una parte fea y desconocida de la historia estadounidense. Otra vez, no soy experto en historia, pero creo que podemos hacer una comparación entre esta guerra y La Guerra de Vietnam, porque ambos son sobre liberación nacional, con tecnología superior contra guerrillas en Asia que desean autogobierno, y con tantas atrocidades horribles. Tengo que revisar esto video en español más de cerca, pero aquí tienes uno sobre este tema triste en inglés:

Elige tu destino

Esta mañana regresé a Pittsburgh en un vuelo nocturno, mi segundo en una semana. Vuelo a menudo, diez veces ya este año, y es solo junio. Aquí hay algunos consejos para volar de manera agradable sin mucho dinero. Estos consejos son especialmente útiles para jubilados activos como yo.

Para ahorrar dinero (o puntos de fidelidad), lo más importante es ser flexible. Si ya sabes tu destino, es bueno ser flexible con la fecha. Trata de evitar las fechas cerca de los días festivos, las vacaciones de la escuela, y los fines de semana. A menudo los martes y los miércoles son los mejores.

Es aún mejor si solo quieres viajar en alguna parte. ¡Qué aventura! En este caso, puedes suscribirte a servicios gratis para encontrar gangas. Si vives cerca de un centro de conexión (buje), te recomiendo que te suscribas al boletín de esa aerolínea. En cualquier caso, te recomiendo los boletines de sus aerolíneas favoritas, con quien tienes puntos de fidelidad.

Si tienes un destino favorito, puedes crear alertas de precio con Google Flights. Entonces Google te mandará esa información directamente a tu buzón electrónico. Google Flights también es un servicio gratis, y es mi herramienta favorita para comparar vuelos en fechas distintas. Sin embargo, en general compro los boletos directamente con la aerolínea en vez de Google o otro servicio. Si hay problemas, es mejor poder comunicar directamente con la aerolínea.

Si quieres viajar a otro país, a menudo puede ser más barato comprar un boleto para un destino cerca de tu destino final. De ese lugar, puedes viajar a tu destino final. Muy a menudo los vuelos entre países en el mismo continente o zona son baratos. Además, es una oportunidad para explorar otro lugar. Una vez visité Paris de camino a Venice y Athens. Durante mi vuelo de regreso, visité Milan. Pero los vuelos de Paris a Venice, Venice y Athens, y Athens y Milan, todos fueron con aerolíneas regionales. Por cierto, este es un ejemplo de un “open-jaw” vuelo, en vez de ida y vuelto. Por este viaje, elegí este boleto por el horario. La conexión puede ser sí un vuelo, o puedes tomar un autobús o tren, o alquilar un coche.

Cuando estés listo para compara el boleto, recuerde que tiene 24 horas para cambiar de opinión y cancelar para obtener un reembolso gratuito, si el viaje comienza o termina en los EE. UU. Si obtienes el boleto con puntos, depende en las reglas de esta aerolínea. En mi experiencia, puedes recibir un reembolso completo si cancelas en cualquier momento antes del vuelo.

Con aerolíneas de descuento, hace poco me enteré de que es más barato comprar en el aeropuerto. Usé este método para comprar mi boleto para mi viaje más reciente. Mi boleto de ida y vuelta, entre Pittsburgh y Las Vegas, solo cuesta 58 dólares. Es mejor si tiene solo una maleta pequeña y no te importa qué asiento tengas.

En resumen, puedes ahorrar mucho dinero y vivir gran aventuras. ¡Elige tu destino!

Un poco más cuidado

Ayer no escribí aquí y así rompí mi racha. Estaba trabajando como funcionario electoral desde las cinco y media de la mañana hasta las ocho de la noche. Me desperté a las cuatro y regresé a casa a las nueve, después de visitar la posible nueva escuela de Marissa. Almorcé con ella durante media hora, y tuve un descanso de quince minutos. Por eso, no tenía ninguna oportunidad para escribir excepto al final del día largo, y en vez de eso me dormí.

Una parte de mi trabajo fue preguntar a cada electora si tiene experiencia con una máquina de votación con una pantalla táctil. Había tres trabajadores con mi deberes del trabajo. Con mis descansos, supongo que me encontré con casi un tercer de unos cuatrocientos votantes en esta manera.

A veces la persona no me contestó, así que le diría “¿Señor? ¿Señora?” Entonces, el/la votante se sorprendería “Ay, pensé que la máquina me estaba hablando!” Sonreíamos por el error y luego seguíamos. Pero me hizo preguntarme por qué unas personas — quizás ocho o diez, es decir más de cinco por ciento, más de uno de cada veinte  — cometí este error?

Pues, la votante es una situación poca desconocida, tiene muchas cosas en mente incluyendo la política, es enfrente de una máquina, y la tecnología está cambiando todo el tiempo. Aun así, no creo que ninguna de mis compañeros funcionarios haya tenido una sola experiencia como esta.

Con cierta reticencia, llego a la conclusión de que es el sonido de mi voz. Me resisto a decir esto porque, para mi, mi propio voz es normal. Tengo un acento, por supuesto — todo el mundo tiene uno. Además, creo que tengo una tendencia hacia laringalización, como mis hermanas y otros de mis parientes. Al otro lado, en situaciones de hablar en público, hago un intento consciente de hablar un poco más fuerte y un poco más de aire, un poco más lentamente y con más articulación. Creo que, como resultado, esto hace que mi voz sea más clara.

Por eso, ayer un votante me sugirió que me dedicara a la radiodifusión. Por eso, el domingo pasado en Zoom dos españoles exclamaron que mi voz es tan clara, y tiene sentido porque yo era profesor. Por eso, en abril cuatro malagueños en el Camino de Santiago comentaron lo fácil que es entenderme. Antes de ayer, creía que la claridad de mi voz es solo una opinion de hispanohablantes, sin mucha experiencia de inglés. Pero ahora creo que es la verdad, si solo hablo con un poco más cuidado.

Una caída a la Tierra

El viernes pasado un astronauta cayó a la Tierra. Bill Anders tomó esta foto famosa durante el primer viaje humano alrededor la Luna. Esta es la primera foto en color de todo nuestro planeta.

NASA Apollo8 Dec24 Earthrise

Con sus dos compañeros, fue la primera persona que vi la Salida de la Tierra. Junto con La canica azul y Un punto azul pálido, este es uno de los retratos más importantes del mundo en el mundo.

Ahora él es uno de los caídos. Con gran respeto, tal vez se podría decir o que el viernes fue su propia última salida de la Tierra, o que la Tierra se levantó para conocerlo, solo una última vez.

En medio de un camino

Llevo un rato estudiando español. Comencé con Duolingo hace cinco años, varios meses antes de nuestro primer viaje a España, aunque mi racha es solo un poco más de tres años (1148 días, para ser exactos). Aún así, es mi método más antiguo y el que uso con más frecuencia, casi cada día.

Me tomé más en serio estudiar español hace veintiuno meses, después de jubilarme en septiembre de 2022. En ese momento comencé a tomar clases en línea varias horas todas las semanas a través de Duolingo. Sin embargo, Duolingo dejó de ofrecer clases en línea en enero de 2023 y esto interrumpió varias comunidades de aprendizaje. 

Desde entonces, mis hábitos han incluyendo clases en línea con Dave Jones y Lisa Weinlader de EE.UU. y con la familia Amador de Colombia. En total, estas clases dura al menos de siete horas y media cada semana. Escribo este blog en español, todos los días desde hace tres semanas. Cuando estoy en Pittsburgh, voy a reuniones con estudiantes y hablantes nativos de español. Además, miro videos en YouTube como “Dreaming Spanish” y “Español con Juan”. Antes, también asistía a clases con Rita Martínez y con Emily Harman, escuchaba audios de Pimsleur, y usaba aplicaciones como Clozemaster y Drops.

Esta semana levanté mis esfuerzos al siguiente nivel. Comencé un curso de ritmo propio, llamada Repaso Total, por el maestro de “Español con Juan”. Esta mañana llevé tres horas hablando con personas de España y de México en un intercambio, y pienso que seguiré haciéndolo todos los domingos. Después, busqué otras reuniones así en Meetup y me inscribí en dos más esta semana.

Todos estos esfuerzos han mejorado mi español. Hace tres años cuando visitaba la Ciudad de México, pude comunicar en todas partes y pedir ayuda a extraños cuando el transporte público no funcionaba. Hace dos años cuando visitaba Baja California, varias personas me felicitaron cuando hablé. Este año cuando visitaba Madrid y Galicia, una persona dijo que mi acento suena como si fuera de Colombia; en otra ocasión, dos otras dijeron que mi acento es de Madrid. Es decir, comentaron sobre mi acento, no sobre mi capacidad para comunicarme. Lo que es más importante, pude cambiar entre ambos idiomas, a veces sin pensarlo.

Reconozco que necesito seguir mejorando mucho más mi nivel. Fallé cuando trataba de traducir para un guía turístico en una iglesia durante mi Camino de Santiago. No puedo entender todo cuando los hispanohablantes nativos hablan rápido. No sueño en español, como mi madre sueña en dos lenguas. Esto es, y seguirá siendo, un viaje de por vida.

Spanish as a blogger

A couple of days ago I wanted to explain why I have been writing this blog in Spanish. I had been doing some spring cleaning on the blog: behind-the-scenes maintenance on WordPress.com, including updating plug-ins; trimming clutter from the sidebar, since I haven’t been using categories or tags; and adding my own Now page, inspired by Derek Sivers.

I realized a few things while poking around settings for the Jetpack plug-in. First, the Akismet filter has prevented over 300 spam comments each month this year. It’s amazing that my little ol’ blog receives so many ridiculously worded comments, even with the marginal cost to send spam being incredibly low. Thinking about that reminds me of this message on Usenet that I remember from as far back as 1986:

This program posts news to thousands of machines throughout the entire civilized world. Your message will cost the net hundreds if not thousands of dollars to send everywhere. Please be sure you know what you are doing.

Second, I saw that I continue to receive few visitors, which is fine and even liberating, for reasons described yesterday. The visitors that I do get seemed focused on posts that I write in English. Beyond the front page, hardly anyone seems to engage with anything that I write in Spanish.

Third, I saw that all of my automatic reposting to social media had been deactivated. Twitter/X no longer supports cross-posting, and Facebook allows it only on pages rather than personal profiles, so I only activated automatic reposting to LinkedIn.

After reactivating LinkedIn cross-posting, I saw an uptick in traffic to this blog. This concerned me, because I didn’t want to spam friends, colleagues, and acquaintances, flooding their feeds with Spanish every day, especially because I suspect most of them don’t understand the language well. So I decided to explain, in English, why I am writing in this language that is not my first. Leading up to that explanation, I started with why I write at all and then why I blog. Now here we are at last, where I explain why I write in Spanish.

The short answer is that I want to become more fluent in Spanish. My skills are reasonable; I’m now at the point where I can interact with people, not only in set transactions at stores and restaurants, but also asking questions at museums and talking at length with fellow travelers I’ve just met. Sometimes I can simply understand something I hear or see, without even consciously switching over to the task of translation. 

While my listening and reading skills are fairly strong, I lag a bit in expressing myself in speech and writing. For this reason, I decided to blog in Spanish. I’m finding that this makes me a more careful writer: not knowing the language nearly as well, I strip down and clarify my thoughts. I keep a tighter focus on the main point I am making, becoming less distracted by my own side thoughts. Overall, I think slightly differently, while having just as much fun with wordplay, sentence structure, and argument construction.

It’s true that I will build less of an audience this way. After all, English is the favorite language of the Internet, not just of my own personal network. But again, I’m not overly concerned about getting hits.

So this is my way of explaining to acquaintances why they will see Spanish from me every day. If they wish, they can always unsubscribe from my feed, much as I described I am doing from my own email subscriptions, in Paulatinamente, which coincidentally is the first Spanish post that they would have received since I reconnected this blog to LinkedIn.

Blogging as a writer

Yesterday I wrote about re-establishing reflective writing as a daily habit. Today I want to describe why I have decided, at least for now, to do this in a blog.

Blogging is a return to form, a form that I took up more than twenty years ago when we lived in Santa Fe, a bit after I completed my book of concrete poetry. The academic calendar at St. John’s College no longer allowed me to teach with the supportive community of writers every summer in the L&T Program at Bard College. I needed an outlet for my creative non-fiction, so I began to blog.

Buried in computer directories, I can see that I began to write Best Let or Get on November 23, 2002. The first entry was “Thanksgiving speeches” and for a while it was one of the top Google hits for that search term. I continued to blog there until January 2004, by which time we were living in Manhattan. I had at least one regular reader, someone who commented on my posts and at one point asked my advice about college planning for his children.

Blogging a liminal place, a safe place. It’s neither fully public nor private. It’s where I can collect some of my private thoughts, chosen from those I am willing to share publicly.

In the act of writing there is always the burdensome question of audience: for whom are you writing? For me, blogging partly absolves me of that concern, or at least makes the answer to that question less distinct. In this blog I am not obliged to write for others, and yet in the act of publishing I must not be writing only for myself. Still, because this audience is small and I don’t know of any regular visitors, I feel more free. If I felt like these posts counted more, I might tighten up; as it stands, the stakes are not high. The audience is abstract, is abstracted, is subtracted, is sublimed. The only certain audience is my selves, both current and future. When I do look back at what I’ve written, I sometimes surprise myself in the rediscovering of who I was. It’s a kind of journaling, which I used to do by hand when I was younger.

However, writing on the computer makes it easier to edit than in a journal. Blogging stands between entirely spontaneous freewriting and more heavy edited formal writing. Each entry is a kernel of thought, which I could someday combine or grow into a longer work, although they also stand on their own, with their own value even if they don’t get used later. Each post is longer than the scribble of a stray thought, but less extensive than a full essay.

Overall, blogging removes friction. There is immediacy between thinking and writing, between writing and publishing. Boom!